Ante el recrudecimiento de la polarización, amenazas, hostigamientos, extorsiones, atentados, asesinatos y otros actos de violencia en el Valle del Cauca y en buena parte del suroccidente colombiano, los Obispos católicos que acompañan las diócesis de Buenaventura, Buga, Cali, Cartago y Palmira, de manera contundente, reiteran el llamado para que cesen estas acciones.
“Y como si Dios mismo los exhortara por medio nuestro, les suplicamos en nombre de Cristo: ¡reconcíliense con Dios!”: (2 Cor. 5, 20).